Queridas lectoras, estimados lectores, no sé qué opinen ustedes, pero al parecer las mujeres no han contribuido mucho al desarrollo de la historia y progreso en nuestro Estado, en nuestra Ciudad. ¿Estaré equivocada?

Si juzgamos por el número de calles en Mérida que llevan el nombre de alguna prócer de la patria, investigadora renombrada, científica importante, heroína histórica, enfermera ejemplar, abogada ilustre, filántropa imprescindible, inolvidable artista o alguna otra mujer cuya labor ha sido sustancial para que nuestra ciudad sea la que es, nos daremos cuenta que la prácticamente inexistente cantidad de calles nombradas en honor a ellas, es lo que podría darme la razón.

Recurrir al sarcasmo ante lo inaudito de esta situación es una especie de estrategia para no caer en la total decepción que produce que sigamos siendo de las ciudades que niegan la existencia de su población femenina, acentuando una mirada parcializada y reduccionista que asimilada desde el patriarcado y sus nocivas consecuencias invisibiliza a las mujeres y sus invaluables e incalculables aportaciones al desarrollo social, cultural y tecnológico de nuestro país.

La organización Calles con Equidad indicó que al 96% de los mexicanos le gustaría que hubiera más calles con nombres de mujeres, pero al parecer esto no es del interés de quienes tienen en las manos el hacer posible esto.

Reconocer que de las 2 millones 472,000 vialidades que existen en México, solamente el 1% fueron nombradas en honor a mujeres, es poner en claro que algo está terriblemente enajenado para quienes están en el ejercicio de estas funciones. 

“La falta de representación de las mujeres en los espacios públicos, en este caso particular mediante el nombramiento de las calles, representa una violación al Derecho Humano de las mujeres de ser reconocidas por sus aportaciones al Desarrollo Económico, Social, Cultural y Científico”, señala Calles con Equidad.

¿Y quiénes son esos señores?

Una vez manejando por la Avenida José Díaz Bolio, mi sobrina me preguntó “¿Tía quién fue ese señor?”, un escritor y arqueólogo muy reconocido en el estado, respondí. Atrapadas en el tránsito reflexionaba si podría haber respondido a esa pregunta de habernos encontrado en otra avenida. Posiblemente podremos saber quiénes fueron Jacinto Canek, Francisco de Montejo, Felipe Carrillo Puerto y Remigio Aguilar y si no lo sabemos Google nos dice todo o corremos a Wikipedia, pero, me pregunto, ¿no sería igual de importante el reconocer y aprender de la existencia, legado y trascendencia de nuestras mujeres?

La encuesta realizada por la ONG, Calles con equidad,  reveló que el 59% de los mexicanos no recuerda una calle con nombre de mujer, considerando esta práctica como indignante, discriminatoria, injusta y machista, pues sólo el 1% de las vialidades en nuestro país tienen nombre de mujer. ¡Sólo el 1%!, ¿se imaginan en nuestra ciudad en qué porcentaje nos encontramos?

La importancia de la representación, no es una moda, es un derecho

Si la ciudadanía está compuesta por mujeres y hombres, ¿por qué los hombres se encuentran únicamente representados en sus calles? 

Yucatán cuenta con 2,320,898 habitantes según datos de INEGI del año 2020, de los cuales 1,140, 279 son hombres y 1,180,619 son mujeres, si esta cifra indica que ellas representan el 50.9% ¿no sería lógico que se viera reflejado en todos los ámbitos del desarrollo social?, si en algo tan elemental como sería el reconocimiento de su existencia nombrando calles, avenidas y espacios públicos, es tan deficiente la ejecución de ello, imaginemos cómo nos encontramos en otras áreas.

Para cerrar esta reflexión, extendemos dos datos más que brillantemente hoy conocemos gracias a la extraordinaria labor de esta Organización No Gubernamental: 

“96% de los encuestados dijo que le gustaría que hubiera más calles con nombres de mujeres; y el 84% está de acuerdo en que, si hubiera más calles con nombres de mujeres, las niñas tendrían más figuras de inspiración y en caso de que las calles tuvieran nombre de mujer, a quienes realizaron la encuesta les gustaría que sean nombradas en honor a:

  • 42% Luchadoras Sociales
  • 18% Artistas
  • 25% Científicas
  • 15% Otra

Ojalá en algún futuro podamos dar direcciones que incluyan los nombres de: Felipa Poot, Antonia Jiménez Trava, Juana María Pool, Sol Ceh Moh, Angélica Balado, María Isabel Poot, Eglé Mendiburu, Isabel Cristina Pérez Ortega, Rosa Torre González, Elvia Carrillo Puerto, entre muchas otras.

¿Y usted querida lectora, estimado lector, ubica alguna calle en nuestra ciudad con el nombre de alguna mujer?

Un comentario en «Las calles invisibles de Mérida»
  1. Lo que no se nombra no existe. Habrá quienes piensen que este tema «son ganas de fastidiar», pero la realidad es que sí es muy importante la visibilización y reconocimiento de las mujeres que han destacado en distintos ámbitos a lo largo de la historia, justo para que sean fuente de inspiración de más mujeres, pero también para que al recordarlas y hablar de ellas y de lo que hicieron, se enriquezca nuestra cultura.

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