Los rollers del Parque de la Alemán

Finalizar un día largo de trabajo y/o estudio, así como otras obligaciones, puede ser liberador si sales de casa con tus patines en mano y te diriges a encontrarte con tu comunidad a divertirte, moverte sobre las ruedas y olvidarte del estrés por un rato… También tú puedes vivirlo en el Parque de la Alemán, pero te contamos desde el principio:

Hace seis años Benjamín Campos tenía la inquietud de reunirse con otras personas que tuvieran el mismo hobby que el suyo: patinar.

Así, con la idea de crecer en comunidad, abrió una convocatoria para encontrarse en el Parque de la Alemán a practicar… Lo que no esperaba era que llegaran principalmente infancias y se convirtieran en instructores del deporte.

“No era la idea que teníamos, pero empezamos a dar clases a los peques y nos fue muy bien”.
BC

Fue así que Keh Rollers nació con la idea de crear comunidad y acabó convirtiéndose prácticamente en una escuela hasta que, luego de dos años, inició la pandemia por COVID-19 que reconfiguró al mundo… y también a Keh Rollers.

“El grupo desapareció”

Pero desapareció en su versión infantil, para alcanzar finalmente la idea original de crear comunidad entre quienes ya patinaban; “la pandemia hizo que muchas personas se sintieran atraídas por este deporte”.

Pasaron de tener en el grupo niñas y niños de 5 a 12 años a convivir con personas de 20 años en adelante, siendo ya alrededor de 15 personas que se reúnen los lunes, miércoles y viernes a las 7:00 de la noche para disfrutar del movimiento sobre ruedas.

Hoy en día son solo dos niños, uno de 13 y otro de 15 años, que continúan entrenando allí e incluso se han ido a competir, pero “no los vemos como parte de la escuela, los vemos como parte de la familia, parte del grupo”.

El patinador mira que este deporte permite despejar la mente y darse un espacio libre, dejando las cuatro paredes que nos encierran; él mismo, junto con su esposa, cuando iniciaron en este ámbito compraron sus patines y se encontraron con personas en diversos parques, con quienes aprendieron.

Una vez que dominaron el uso de los patines, comenzaron a usarlos en las calles, para visitar más parques y conocer a más gente de esta comunidad de rollers.

Para él, usar sus patines significa “sentirse libre, desestrés y sentirte bien contigo mismo”; pero también encuentra que el compañerismo es un eje fundamental en este deporte y que le impulsa a continuar practicándolo.

“La comunidad se ha vuelto muy grande y es muy padre salir y toparte con personas en patines y saludarles a pesar de que no nos conozcamos, por el simple hecho de que estás patinando, y así se van formando las amistades”.
BC

El fundador de Keh Rollers aprovecha también para solicitar que en el Parque de la Plancha les incluya, pues las patinetas no son las únicas que pueden utilizar la infraestructura que construyeron en ese Skate Park y vivieron mucha desilusión cuando les prohibieron patinar (con patines, valga la redundancia) o utilizar bicicletas BMX.

“Esperamos que nos escuchen, que vean que existen otros tipos de deporte que pueden usar esas mismas instalaciones; incluso hay concursos de patinaje en rampa”.
BC

Finalmente, invita a unirse a la rodada en pijamas (para patines, bicicletas, pantinetas) que realizarán el próximo 2 de diciembre en la bici ruta nocturna, iniciando en el Monumento a la Patria a las 8:00 de la noche; además, también les impulsa a sumarse a las prácticas en el Parque de la Alemán, expresando su disposición por enseñar a usar los patines para quienes aún no sepan.