A la mitad de mi charla con Laura, quien siempre te hace sentir bienvenida y contenta en una de las tiendas de artesanías más hermosas de Mérida, me sentí tan abrazada por la generosidad de sus palabras y su narrativa con respecto a los orígenes y visión de No me olvides, que sentí el impulso de contarle algo muy personal, incluso mi voz quebrada buscó su mirada para no romper en llanto.

Le conté que todas las noches al caminar al lado de mi perrita Shily Roberta (a quien dedico esta nota), pasábamos frente a su tienda ubicada en Plaza Banderas en la Colonia Vista Alegre Norte, nos deteníamos a observar todo aquello que “queríamos (ambas)” comprar; nos entusiasmaba adquirir una hermosa gatera para su hermanito felino que siempre anda cazando su propio espacio, en una casa dominada por canitos. Lamentablemente mis complicados horarios no habían coincidido con la tienda abierta, pero sólo era cuestión de organizarme para ir una tarde por ella…
No me olvides Artesanal este 2023 cumple cuatro años de tener sus dos sucursales (Vista Alegre Norte y Montejo) abiertas al público, pero en sus inicios, comenzó sus ventas a través de las redes sociales. La necesidad de que las personas pudieran ver las piezas y sentirlas, interactuar con ellas, fue lo que les llevó a establecer los locales.
La tienda se especializa en artesanías mexicanas, especialmente la cestería, reuniendo las mejores y más bellas piezas de esta técnica artesanal, originarias de estados como Oaxaca, Chihuahua, Michoacán, Guerrero y Puebla.

Con el orgullo que corresponde, Laura rememora, “sin temor a equivocarme fuimos pioneros en introducir y vender estas artesanías, actualmente han surgido otras marcas, que incluso llegaron a comprarnos a nosotros; al inicio comenzamos sólo con Oaxaca y hoy ya tenemos artesanías de otros estados. Comenzamos con cestos y bolsas, pero la gente comenzó a pedir más.”
El material con el que se realizan estas artesanías es de fibras cien por ciento naturales, de distintas regiones y orígenes. Materiales como la chuspata de Michoacán, la fibra de palma de Guerrero, la de Oaxaca y la fibra de pino de Chihuahua, son algunos ejemplos de materiales con los cuales trabaja No me olvides Artesanal.
Laura Trejo, nos explica que la calidad de las piezas ha sido clave para que la gente se enamore de los productos, los busque y promueva. En su caso, ella misma, al ser una gran admiradora de las artesanías, sabe que lo que más motiva a adquirir alguna, es que además de ser elocuente y bella, esté muy bien elaborada. Otro gran atributo, es que los precios sean lo más justos posible, tomando en cuenta tanto a lxs artesanxs como a lxs consumidorxs.
Para No me olvides Artesanal, es muy importante que los precios sean ecuánimes para todos los involucrados en este proceso; que los costos sean equitativos para quien elabora la artesanía, por su trabajo y tiempo (muchas veces bastante prolongado), para la tienda, pues se debe considerar los costos que genera tener un local abierto al público, la transportación, embalaje y mantenimiento, el pago de honorarios de empleados, así como una renta y finalmente que pueda ser razonable para quien adquiere la pieza.
Detrás de cada artesanía, una historia
“Nunca hay que olvidar que estas piezas están hechas por una persona, hay quienes están dispuestos a escuchar la historia de la pieza, de dónde viene y de qué está hecha, siempre estamos en la mejor disposición de compartir información, tratamos de que la artesanía mexicana esté a la mano de todos, dar a conocer todo lo que se hace en nuestro país. A veces por la facilidad, uno puede ir alguna tienda departamental a comprar algo, pero muchas de esas piezas no están hechas de materiales naturales, están hechas de fibras sintéticas y muchas de ellas no están hechas en el país.”, nos explica Laura, mientras se prepara para recibir a una clienta. La señora es atendida por Katty quien con mucha paciencia le muestra todo lo que le solicita para las decoraciones que necesita.
La presencia de la visitante a la tienda nos hace recordar que No me olvides es grata para quien decida pasar un momento ahí, ya sea para adquirir algo o para observar solamente, Laura nos cuenta que alguna vez una señora le dijo: “Todas las personas que tengan un mal día deberían venir aquí” y eso es una gran motivación para ella y para todo el equipo, que su tienda sea un espacio tan afable. La tienda es muy bella y cada rincón tiene maravillas que fascinan.
La historia detrás de No me olvides
Laura nos cuenta acerca de la historia de la tienda que nace arropada como un emprendimiento familiar que se ha tejido entre todos los miembros. Sus estudios como Licenciada en Turismo en la Facultad de Ciencias Antropológicas de la UADY, le ha dotado de una sensible formación para valorar lo que realizan las comunidades, pues el Turismo no es solamente la parte que comúnmente conocemos (hotelería), para quienes se forman dentro de esta profesión es importantísimo saber acerca de sustentabilidad, investigación de la repercusión del turismo en las comunidades y su economía, así como las actividades sociales de las familias.
Dentro de las tareas a las que se puede dedicar una familia, encontramos las artesanías y es justo en ese ámbito donde quienes construyen No me olvides Artesanal tienen puesta su mirada. El deseo de que muchas más personas se maravillaran con las artesanías que se realizan en diversos rincones geográficos de nuestro país y que también pudieran tenerlas en su hogar, fue y sigue siendo la gran motivación de esta sensible empresa. Esa admiración de Laura por el proceso de fabricación de una artesanía, su belleza, el tiempo dedicado y sus materiales, fue lo que la hizo una gran compradora de muchas de ellas, afición que con el paso de meses fue la génesis para el surgimiento de No me olvides.

Laura Trejo define una artesanía de la tienda como “algo hecho por una persona que invirtió tiempo, trabajo. A veces leemos en algunos lugares -nuestros artesanos lo hicieron con amor, hecho con amor- y se romantizan esas frases, o se romantiza la artesanía, son objetos hechos con las manos de personas que invirtieron mucho en ello.” Juntas entonces, reflexionamos que en muchas ocasiones cuando romantizamos esta labor, podemos llegar a hacer que se pierda el valor fundamental de algo, coincidimos en que es importante entregarle a la artesanía y a quienes la realizan, su justa dimensión. Su gran valor. Como un producto artístico sí, pero también como un oficio profesional que merece ser valuado en su justa proporción. Las frases trilladas de “hecho con amor” pueden llegar a condicionar a personas que incluso pueden sentirse tentadas a regatear el precio, ¿cuánto es lo menos?, porque… ¿Acaso el amor tiene precio? Todo trabajo vale a partir del sistema de creación artística y producción de un producto y eso jamás se nos debe olvidar. Dignificar el trabajo de nuestros artesanos es una tarea de día a día y No me olvides lo está haciendo excelente.
Siempre estarás presente
Una artesanía es bella y es útil, es una manifestación creativa e identitaria. La técnica y la elaboración artística se fusionan en las manos del artesano o de la artesana para generar un objeto único, fascinante y significativo.
“Mi abuelita solía decirme ‘No me olvides’ y de ahí viene el nombre de la tienda porque de igual manera siento que cada una de esas piezas creadas, busca no ser olvidada.” Finaliza Laura y yo le comparto que su tienda, estar en ella, pasar frente a ella, o adquirir una pieza de ella, es para mi refrendar el amor y la compañía por mi perrita Shily, mi compañerita de aventuras, con quien descubrí la tienda, con quien planeaba compras y quien muchas veces, al ya saberse la ruta del paseo se llegó a detener ante el aparador de la tienda, observando al igual que yo, con curiosidad y alegría. Pocos días antes de ir a comprar algunas cosas a No me olvides Artesanal, Shily Roberta partió al cielo canino. Mi corazón completamente roto dejó por muchos días de querer salir a recorrer las calles que tanto me significaban a su lado, hasta que una tarde llegó a mi mente, como una suave brisa, un pensamiento: No me olvides…y decidí enfilarme a la tienda. La abuelita de Laura, tenía toda la razón…
No te olvido…siempre estás conmigo, Shily.

Daniela Esquivel: Directora de escena, promotora de lectura, profesora y colaboradora de medios digitales. Exploradora gastronómica y lectora incansable. Nómada entre la Gran Tenochtitlan y la Tierra del Faisán y del Venado.

