En Mérida, existe una boutique para ir a intercambiar ropa y crear arte con supra reciclaje, ¿lo sabías? Aquí te contamos todo para que puedas unirte a una de sus fiestas de intercambio mensuales.
Este proyecto nace de Yenny y Karla Fernández, dos hermanas que tienen un sólo objetivo: crear conciencia, meta para la cual crearon De Amores Boutique Sustentable.
Fue luego de viajar durante varios meses, Yenny a Canadá y Karla a Francia, que conocieron boutiques con esta perspectiva para comprar ropa a menor precio, pero dándose cuenta de que ahí adquirir ropa de segunda mano era algo muy natural, mientras que aquí sigue siendo “mal visto”.
Entonces, tomando como referencia lo que vieron, quisieron que en Mérida también pueda circular la ropa entre personas en un concepto de boutique para impulsar a la gente a comprar de esta forma.
“Lo importante es saber que no es comprar por comprar […] Lo que queremos es crear conciencia de lo que consumimos, de lo que compramos, hasta en los mismos intercambios”.
YF
Apenas el fin de semana pasado, tuvieron la sexta edición de fiesta de intercambio, luego de iniciar este proyecto desde diciembre y asistieron alrededor de 25 mujeres al evento.
Para participar en estas fiestas, empiezan a recibir la ropa desde días antes, brindándoles puntos para luego adquirir otras prendas; así, con una estrategia de puntos, cada quien puede hacer sus compras en la boutique.
Pero esto no es lo único que hacen, también tienen talleres de upcycling (suprareciclaje) para crear conciencia sobre cómo se pueden utilizar objetos que antes serían solo un desecho como corchos, cartón, PET, entre otros.
“En la primera edición, no cobramos nada, fue totalmente para darnos a conocer y fueron 30 personas, después empezamos a cobrar 100 pesos porque empezamos a tener gastos por la etiquetada y reparación de ropa, entonces bajó (la afluencia de gente)”.
YF
Sin embargo, decidieron crear conciencia también a través de redes sociales, explicando de qué se trata el proyecto y por qué es importante aportar con la economía circular; así, han logrado crecer el interés hasta lograr que esta sexta edición tuviera casi la misma cantidad de gente que tuvo la primera sin costo, aunque esta ya costó 300 pesos.
Además de promover el trueque de ropa, libros y otros artículos, promueven un cambio de conciencia pidiéndoles asistir con sus propios vasos para no usar desechables durante sus eventos, realizan etiquetas que se pueden sembrar y realizan los talleres de upcycling en cada fiesta.
Para los talleres de suprareciclaje, aceptan donaciones e igualmente compran los productos que para otras personas serían un desecho.
En el caso de la ropa que reciben, pero que no es apta para entregar en intercambio, la donan a casas hogares o, a Camino Amarillo, una organización que se dedica a rescatar animalitos.
¿Qué opinan las asistentes?
Diana Prado expresó sentirse muy contenta por participar del evento, pues no conocía un concepto de este tipo y logró renovar su guardaropa de una forma más consciente, así como dejar prendas que ya no le quedaban.
“Traje de todo, vestidos, pantalones, camisas y me llevo camisas, vestidos; más vestidos de los que yo había traído”.
Gabriela Pintado llegó a este evento porque conocía “Verde Permuta” en la Ciudad de México y le llamó la atención cuando vio el evento de De Amores, le encantó encontrar una opción en Mérida, pues la contaminación del fast fashion es muy grande, pero también implica un trato injusto para las personas que trabajan en la manufactura.
“Ahora hasta las relaciones son desechables, todo es desechable, entonces esa parte en la que una persona se ocupa de aprender a coser un botón o de darle amor a la prenda porque sabes que otra persona la va a utilizar, esa reciprocidad que también tiene que ver con los valores, me mueve”.
Comentó que disfrutó mucho el evento porque fue muy sencillo y hubo mucho contacto humano, además de la concienca ambiental.
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