¿Acompañas a una persona con alguna enfermedad? Esto puede serte útil

PorCecilia Abreu

25 de enero de 2024

Cuando una enfermedad llega a la familia, hay una persona que suele tomar el rol principal en los cuidados, pero ¿qué pasa con ella? Es importante que, aunque forme parte fundamental de la vida de su familiar, también cuente con herramientas para su autocuidado.

“Tenemos que aprender sobre la nueva condición de nuestro familiar, el aprendizaje de la enfermedad de nuestro familiar nos va a abrir un panorama completamente diferente”.

SR

La neuropsicóloga Sandy Rosas, explicó que como seres humanos solemos quedarnos en el sufrimiento que nos ocasionan las pérdidas, incluso cuando las personas siguen con vida, con pensamientos como “recuerdo cuando todavía caminaba o podía hacer esto”.

Por eso, desde su visión, es fundamental conocer el padecimiento del familiar, obteniendo herramientas para acompañarlo, sin que de un momento a otro se convierta en su cuidador principal*.

Algunos de los puntos a investigar o conocer, dijo, son: ¿a qué me enfrento?, ¿cuáles son los síntomas?, ¿cómo será la progresión de la enfermedad?, ¿cómo puedo apoyarle?, ¿qué puedo dejar que haga por sí mismo?, ¿es necesario que haya alguien más para sus cuidados?

Sugirió incluso acercarse con la enfermera, por ejemplo, para preguntar cómo hacer el cambio de la cama a la silla de ruedas, cómo curar una herida, etcétera.

Al hacer este cambio abrupto, la gente suele descuidar sus necesidades y metas e incluso actividades que realizaban de manera cotidiana; “esto genera un impacto a nivel físico y cognitivo de la persona que cuida”.

Aunque reconoce que es inevitable que con el tiempo las personas requieran más de su cuidador o cuidadora como consecuencia de la enfermedad, enfatizó que no es lo ideal cambiar por completo su rol con el paciente, en especial tan de golpe, pues comienza a vivir agotamiento físico y mental.

“No nacimos siendo cuidadores y, por lo tanto, no tenemos las habilidades para hacerlo […] Tenemos que aprender a cuidar de la persona, tenemos que desarrollar habilidades”.

SR

Para esto último, sugirió identificar las propias fortalezas y debilidades, así como reconocer qué se está dispuesto a invertir con respecto al tiempo, recursos (para ayuda en casa, medicina, etc) y dedicación.

“Otra cosa que se suma a ese agotamiento es que además del cuidado del familiar, también tengo que hacer el cuidado de hogar”.

SR

Resaltó que no debe ser la misma persona la que cuida a la persona que la que cuida el hogar para evitar la saturación de la persona cuidadora.

¿Qué pasa en las dinámicas familiares?

Cambian por completo. “Y lo podemos ver en todas las clases sociales”.

A pesar de que la situación pueda ser diferente entre familias, destacó que lo primero siempre será identificar quién es el familiar responsable o líder; sin embargo, en la realidad cuando llega una enfermedad, salen a la luz todas las situaciones que no han tenido solución para la familia.

“Empiezan a surgir historias que no se han sanado”.

Sandy Rosas es neuropsicóloga, especialista en la salud del adulto y persona mayor

Señaló que, de forma común, quienes acaban como cuidadoras son las mujeres, quienes no tienen hijos o solteras e incluso la esposa del adulto enfermo.

En estas situaciones incluso llega el tema de los recursos económicos, advirtió, pues la persona que tiene el poder adquisitivo para los medicamentos suele ser quien toma las decisiones sobre los cuidados, dejando a merced a la persona que sí se encarga de ellos.

¿Qué hacer entonces?

Evitar la pérdida de las propias actividades propias, en general, teniendo autocuidado también, a pesar de cuidar de otra persona también; siempre teniendo en cuenta, dejar a la persona enferma con algún especialista u otro familiar.

Una de las recomendaciones que hizo la especialista es hacer una lista de las personas con las que pueden contar para el cuidado del familiar, considerando a las personas que han expresado apoyo.

“El estrés, el cansancio, la irritabilidad, el agotamiento, el desánimo, ocasionan que no veamos todo lo demás”, detalló que por eso es importante priorizarse para hacer esta labor.

*Cuidador principal: toda persona que tenga a su cuidado a otra persona que es dependiente de ella para actividades de la vida básica: baño, medicamentos, citas médicas.

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