Falta un censo que nos diga cuántos perros viven en casa como mascotas en Mérida, pero es evidente que son un número significativo, y que va en aumento la tendencia de tener un can de compañía.
Un nuevo modelo de familia, esa en la que un perro toma el lugar central del núcleo familiar y se convierte en algo así como el sustituto de un hijo.
Forbes, México. Los “perrhijos”, realidad en auge y expansión.
En una encuesta realizada en México en noviembre de 2020, la mayoría de los participantes dueños de mascotas (un 84%) reportaron tener uno o más perros.
Statista. Distribución porcentual de hogares con mascotas en México en 2020, por tipo de mascota
Los que tenemos y cuidamos de nuestros perros, es decir, les damos una vida digna, como cualquier ser vivo tiene derecho, sabemos que su tenencia implica una inversión en alimentos, higiene y cuidados veterinarios, pero también nos aplica una consciencia de que al tenerlos adquirimos deberes ciudadanos, entre ellos, levantar las heces que defecan cuando los sacamos a pasear.
Hay que hacer un esfuerzo
Sí ya sé, que no es agradable levantar las heces del perro, pero sobre todo si la recolección no se hace con cuidado, podemos terminar embarrados de ellas. Sin embargo, hay razones poderosas para hacerlo.
- Las heces expuestas al aire libre son fuente de bacterias, virus y parásitos.
- Pueden provocar enfermedades gastrointestinales u oftálmicas, entre otras.
- Se están convirtiendo en un problema de salud pública y de conservación del ambiente.
Según cifras proporcionadas por la los Servicios de Salud del Estado de Yucatán, los perros del estado producen 64 toneladas de heces, que en su mayoría se volatiliza y flota en el ambiente, situación que aumenta durante la temporada de calor y la sequía
NotiRasa. En Yucatán, perros producen 64 toneladas de heces al día
- De no hacerlo se viola el Reglamento para la protección de la Fauna en el municipio de Mérida.
Artículo 22.- Las personas que conduzcan perros en la vía pública o áreas públicas, tendrán que recoger los residuos fecales, poniéndolos en bolsas impermeables y depositándolos en basureros o depósitos destinados para este fin.
Título Tercero. De la protección de la fauna; Capítulo 1. De los dueños poseedores de animales.
Aun con un marco legal, campañas de sensibilización por las autoridades, la conciencia no llega, nos importa poco que las calles estén llenas de heces, de lo contrario no lo estuvieran, y ojo, porque no importa el código postal en el que se viva no cambia la situación.
Ve estas fotos, las tomé entre las colonias Altabrisa y Montecarlo, al norte de la ciudad, me las encontré en un perímetro menor a un kilómetro.
Las heces están ahí formando colonias de microbios listos para invadir nuestros cuerpos y el de nuestras mascotas, y del mismo modo expuestos los menos afortunados: perros y gatos en situación de calle, que dicho sea de paso se presume que en Mèrida deambulan 64 mil perros y gatos callejeros, lo que equivale al mismo número de focos de infección.
El problema es grave, y sólo los ciudadanos somos la solución, al atender nuestras obligaciones como tutor de un perro o un gato, entre ellas levantar sus heces,